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David Corona Solís, fue encontrado culpable por el feminicidio de su amiga, por lo que fue sentenciado a siete décadas de prisión.  

De acuerdo con los hechos, la hoy occisa de 36 años acudió al domicilio de Corona Solís, ubicado en la Unidad Habitacional Tepalacapa en Cuautitlán Izcalli, cuando, en algún repentino momento, (ya que se desconoce que es lo que originó que reaccionara de esta manera) la inmovilizó y comenzó a estrangularla, hasta que murió.

El masculino comenzó a cercenar el cuerpo de su amiga; algunos restos guardó en su domicilio, mientras la mayoría de sus restos los trasladó y abandonó al interior de un pozo de agua potable ubicado en la colonia Centro Urbano, del mencionado municipio.

Luego que sus familiares notaron la ausencia de ella, reportaron su desaparición y, conforme avanzaron las semanas así como las investigaciones, se tenían indicios que había sido asesinada, por lo que el primer sospechoso fue el hoy sentenciado.  

Con las pruebas recabadas, el Ministerio Público solicitó una orden de cateo en la casa del David, dando como resultado el hallazgo de restos óseos, y tras las pruebas practicadas, se pudo determinar que se trataba de la mujer desaparecida, por lo que fue detenido de inmediato.

Este hombre fue ingresado al Penal de Cuautitlán Izcalli, y tras el juicio que se prolongó, finalmente fue hallado culpable, por lo que el impartidor de justicia le impuso 70 años de pena privativa de la libertad, así como el pago de $193,508.00 por motivo de reparación del daño, así como una multa por $403,000.00.